El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, confía que la investigación abierta por un juzgado contra el alcalde de Paterna, Juan Antonio Sagredo, y dos concejales socialistas por la adjudicación del contrato del concierto de Halloween, «acabe sin ningún tipo de problema» y «todo se aclare».

Puig, en declaraciones a este diario durante la inauguración del Centro Ocupacional de Mislata, señaló que «estamos al lado de que se esclarezca cualquier cuestión que investigue la justicia, la respetamos», y mostró la «convicción de que las cosas se han hecho de forma ordenada y clara».

Cabe recordar que fue el PP de Paterna el que llevó a la fiscalía las posibles irregularidades en la adjudicación de la fiesta de Halloween 2017, en base a los reparos recogió la secretaria en un informe. El pasado abril prestaron declaración como testigos los cuatro concejales populares que firmaron el escrito y la propia secretaria. Tras aquello, ahora han sido citadod a declarar como investigados (antes imputados) el Sagredo, y los concejales socialistas Nuria Campos y Julio Fernández, y un técnico municipal. Nadie más, pese a que el escrito del PP apuntaba a la aprobación de la adjudicación por parte de la Junta de Gobierno Local, donde también figuran concejales de Compromomís y Paterna Sí Puede.

En este sentido, Puig aprovechó para atizar a los populares por su «operación ventilador». El PP, afirmó el presidente, «intenta de alguna manera democratizar la corrupción, para decir que todos somos iguales, y todos no somos iguales. El PP tiene dos consellers en prisión y Ricardo Costa ya ha dicho que hicieron campañas electorales haciendo trampas. Por tanto, es evidente que ellos han cometido financiamiento ilegal y están condenados, mientras que nosotros estamos intentando hacerlo lo mejor posible, respetando a la justicia, a los periodistas... todo lo contrario que el PP, que intentó apartar a jueces, denostó a periodistas, acusó a la policía... nosotros somos de entender la democracia de otra manera y actuamos de otras manera», aseguró.

Puig reveló que había intercambiado mensajes con Sagredo, pero tenía pendiente una llamada, e insitió en que espera que «todo se aclare» y que el alcalde «explicará todo lo que se le pregunte». El presidente apuntó que la causa se centra «en un contrato menor y creo, sinceramente, que puede haber algún tipo de irregularidad administrativa» pero defendió que en los ayuntamientos «se tratan muchas cuestiones en las que el alcalde no tiene conocimiento», pero «en cualquier caso, no quiero adelantarme al trabajo de la justicia».