Ya no sólo los seres humanos pueden disfrutar de las ventajas en materia de diagnóstico que suponen las tomografías axiales computarizadas o TAC. Ahora, cocodrilos, hurones, pajaritos, perros, gatos y hasta lagartos gigantes, así como otras especies animales, pueden someterse en la clínica veterinaria Technology Animal Center a uno de estos escáneres, a los que normalmente recurren los médicos para evaluar de forma precisa tumores y frácturas de huesos en cuerpos humanos.

«Ofrecemos a los animales el mismo servicio de TAC que a las personas; de hecho, el nuestro es un aparato de humanos», señala Paula Cava, una de las responsables del centro. Según explica, su clínica es uno de los pocos lugares de Valencia que pone a disposición de los animales esta tecnología.

Las ventajas que aporta el TAC al diagnóstico de animales son numerosas. En primer lugar, permite hacerlo de forma más rápida puesto que no es necesario anestesiar completamente al sujeto, «sólo de forma parcial ya que el animal debe estar quieto mientras dura el escáner».

La duración del examen médico no excede más de los tres minutos y la operación total no suele alargarse más allá de la media hora, el tiempo necesario para dormir la zona del cuerpo del animal que se quiere analizar o estudiar para un diagnóstico lo más completo posible.

La otra ventaja de este proceso reside en que esta técnica es mucho más precisa que una radiografía convencional. «Con el TAC obtenemos una imagen en tres dimensiones que, además, podemos visionar desde cualquier ángulo e, incluso, fraccionar una parte del cuerpo y ver, por ejemplo, qué hay en el interior de la columna vertebral. De esta manera podemos diagnosticar de manera mucho más fiable».

Un referente en el sector

La clínica veterinaria Technology Animal Center nació el pasado mes de julio y, en este corto espacio de tiempo, ya se ha convertido en un referente en el sector. No obstante, acudir directamente a ellos es imposible. «Nosotros recibimos pacientes derivados de otras clínicas. Además, también colaboramos con algún grupo de investigación», matiza la responsable de este centro pionero.

Desde la clínica valenciana aseguran que han pasado por su escáner animales tan exóticos como un cocodrilo o un varano, una especie gigante de cocodrilo. Otros más comunes han sido conejos, hurones o pajaritos, aunque según afirman, la mayor cantidad de escáneres los han protagonizado perros y gatos.

«Las patologías que más hemos diagnosticado han sido, con diferencia, problemas de columna vertebral, sobre todo hernias discales», subraya Paula Cava. Sin embargo, el TAC también se ha mostrado muy útil para detectar pequeñas fracturas que pasan inadvertidas en una simple radiografía y para observar con precisión otras complicaciones más graves, como pueden ser los tumores. «Con esta tecnología podemos ver hasta qué punto llegan o comprobar si tocan algún órgano vital», concluye Cava.