El periodista iraquí encarcelado por lanzar sus zapatos contra el ex presidente de Estados Unidos George Bush, Muntazer al Zaidi, probó este martes de su propia medicina durante una conferencia en París en la que se convirtió en blanco de un ataque también con calzado.

Al Zaidi hablaba en favor de las víctimas de la guerra en Irak cuando uno de los asistentes le lanzó un zapato que no llegó a alcanzar al reportero pero que despertó un fuerte revuelo en la sala. Los medios franceses identificaron al agresor como un periodista iraquí exiliado que previamente había defendido la política estadounidense frente a la dictadura que, dijo, defiende Al Zaidi.

En el primero de los casos, los 'zapatazos' de Al Zaidi le costaron una sentencia de tres años de cárcel por atacar a un jefe de Estado. La condena se redujo a un año y finalmente quedó en libertad el pasado mes de septiembre.

"Éste es el beso de despedida del pueblo iraquí, perro", afirmó el ahora agredido durante la rueda de prensa del entonces inquilino de la Casa Blanca, en una acción que levantó tantas críticas de las autoridades locales como admiración de parte de la población.