Los equipos de salvamento rescataron hoy los últimos cinco cuerpos sin vida que permanecían en una mina de carbón en la provincia de Henan, centro de China, lo que sitúa en 37 el número de personas que murieron por asfixia tras un escape de gas dentro del pozo el pasado sábado, informó la agencia Xinhua.

El accidente tuvo lugar en la ciudad de Yuzhou y en el momento de lo ocurrido 276 mineros trabajan en el yacimiento, propiedad de Pingyu Coal & Electric Co. Ltd.

Un total de 239 trabajadores consiguieron escapar, mientras que 21 fallecieron y 16 quedaron atrapados.

La primera investigación puesta en marcha para averiguar las causas de la fuga señala que el escape estaba compuesto por 173.500 metros cúbicos de gas.

En 2009, más de 2.600 mineros murieron en yacimientos chinos de carbón a causa de la sobreexplotación porque cada vez se ha de perforar a mayor profundidad, lo que incrementa el riesgo de accidentes.

El carbón representa un 70 por ciento del consumo energético de China y constituye la principal fuente de energía para el país asiático, que sigue sin encontrar una alternativa viable a esta materia prima barata, pero altamente contaminante y de peligrosa extracción.