El Gobierno de México precisó que el seísmo de 7,8 grados de magnitud en la escala abierta de Richter registrado hoy alrededor del mediodía causó once heridos -dos en la capital mexicana y nueve en el estado de Oaxaca-, y daños en cientos de casas en la costa sur del país.

El secretario (ministro) de Gobernación, Alejandro Poiré, dijo en rueda de prensa que las autoridades mantienen la alerta para atender los posibles daños derivados del terremoto, que provocó escenas de pánico en los estados del centro y sur del país.

"Hoy vivimos un sismo de magnitud de 7,8 grados, el más alto desde el de 1985, y lo que se demostró fue la capacidad de todo el sistema para actuar ante un fenómeno de esta naturaleza", declaró Poiré.

Señaló que algunos de los lesionados se encuentran graves, pero son atendidos en diversos centros médicos y se dará información sobre su estado de salud.

Aseguró que la gente siguió las instrucciones para evacuar los edificios de manera organizada, y en esa medida "México ha demostrado que se ha trabajado para enfrentar estos fenómenos".

Precisó que durante la tarde se han registrado 19 réplicas de 4,6 a 5,3 grados de magnitud en la escala de Richter, y añadió que la alerta se mantendrá durante 24 horas.

Explicó que todos los organismos de protección civil se pusieron en marcha y que el Gobierno federal están en coordinación con los estatales para atender todo tipo de emergencias.

Poiré expuso que en caso de que se confirme que las casas dañadas en los municipios costeros de los estados de Guerrero y Oaxaca representan riesgos, las personas podrán ser trasladadas a refugios temporales como lo estipulan los protocolos de protección civil establecidos.

Precisó que todos los servicios públicos se mantienen operando con normalidad y que las instalaciones estratégicas no sufrieron daños significativos.

Dijo que las autoridades continúan la evaluación de todos los inmuebles donde se han producido daños, como hospitales y escuelas, para garantizar la seguridad de las personas.