Los colegios electorales abrieron hoy sus puertas en Siria para elegir un nuevo Parlamento, pese al boicot de la oposición y mientras el país continúa sumido en la violencia.

Unos 14,8 millones de sirios están llamados a acudir a las urnas para elegir entre 7.195 candidatos a los que 250 diputados que ocuparan los escaños del Parlamento.

Por primera vez, la votación es supervisada por una Comisión Electoral independiente y, según la agencia de noticias oficial siria, Sana, los resultados preliminares se darán a conocer inmediatamente después de que se computen los sufragios, en presencia de los candidatos o sus representantes.

Se trata de los primeros comicios pluripartidistas desde la llegada al poder del partido Baaz, la formación política del presidente Bachar al Asad, en 1963, después de la aprobación de una nueva Constitución en el referéndum celebrado a finales de febrero pasado.

La redacción de una nueva Constitución era una de las principales demandas al inicio del levantamiento popular contra el régimen sirio, en marzo de 2011. Desde entonces, más de 9.000 personas han muerto por la violencia en Siria, según datos de la ONU.

Varias explosiones se registraron hoy en la localidad de Dael, en la provincia de Deraa, en el sur de Siria, pese a la celebración de elecciones legislativas, denunciaron los grupos opositores.

Los Comités de Coordinación Local apuntaron que varios estallidos sacudieron los barrios meridionales de Dael, donde también se oyeron disparos de armas pesadas desde los alrededores de la localidad.

La Comisión General de la Revolución Siria y la red Sham aseguraron que también hubo explosiones en otros puntos de la provincia como Yasem y Sheij Miskin.

Asimismo, varios francotiradores se apostaron en las azoteas de los edificios, según el mismo grupo opositor.

Estas informaciones no han podido ser verificadas de forma independiente debido a las restricciones impuestas por el régimen sirio a los periodistas para trabajar.