Al menos 25 personas han muerto y otras 50 han resultado heridas después de que un terrorista suicida detonara la bomba que llevaba adherida al cuerpo en el interior de una mezquita durante el funeral de un hombre asesinado por milicianos el sábado, según ha informado la Policía iraquí.

El atentado suicida ha tenido lugar en la mezquita de la localidad de Mussayab, a unos 60 kilómetros al sur de la capital iraquí, Bagdad. La Policía ha señalado que todavía quedan cuerpos atrapados bajo los escombros.

Por el momento, se desconoce quiénes se encuentran detrás de este atentado, el último en una serie de ataques contra lugares de culto religioso, tanto suníes como chiíes, especialmente durante un funeral.

El sábado pasado fallecieron 65 personas en un triple atentado durante un funeral en el barrio chií de Ciudad Sadr, en Bagdad. El domingo pasado, murieron otras 16 personas tras un atentado suicida en el barrio suní de Doura, también en Bagdad, durante un velatorio.

Según el grupo de vigilancia Iraq Body Count, desde principios de este años han fallecido más de 6.000 personas en incidentes violentos en el país.