El viceministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, afirmó hoy que el 98 por ciento del acuerdo sobre el programa nuclear de su país está cerrado.

Irán y seis potencias negocian desde el miércoles en Ginebra un arreglo para garantizar la naturaleza pacífica de las actividades nucleares de Teherán.

"Hemos realizado grandes progresos y estamos más cerca del final, pero las conversaciones avanzan lentamente", dijo el "número dos" del equipo negociador iraní.

De otra parte, afirmó que la cuestión del enriquecimiento de uranio está resuelta "en la práctica" dentro del texto que se negocia.

Irán ha reclamado a lo largo de estas negociaciones que se le reconozca el derecho de enriquecer uranio dentro de sus fronteras, un punto de divergencia central con el grupo de seis países con el que negocia (Estados Unidos, Rusia, Francia, Reino Unido, China y Alemania) conocido como G5+1.

Irán ha llegado a dominar la tecnología para enriquecer de uranio al 20 por ciento, un proceso que en caso de que pueda mantener deberá rebajar considerablemente, una exigencia clave de sus contrapartes en estas negociaciones.

De esa forma se evitaría que Irán pudiese eventualmente utilizar ese uranio enriquecido -en forma de combustible nuclear- para la fabricación de una bomba atómica.

En estas reuniones participan desde ayer los ministros de Exteriores además del iraní.

Sin embargo, Araqchi también reconoció ante la prensa de su país que los "asuntos restantes son difíciles y necesitan la toma de importantes decisiones".

El viceministro no descartó que las reuniones para cerrar lo poco que falta del acuerdo prosigan durante la noche y puedan incluso prolongarse hasta mañana por la mañana.

En todo caso, aseguró, no se prolongarán "más allá del mediodía" de mañana.