Su imagen pidiendo clemencia antes de ser rematado en la acera de una calle parisina ha dado la vuelta al mundo en los últimos días. El policía que se enfrentó a los autores de la masacre en las oficinas de la publicación Charlie Hebdo, Ahmed Merabet, es un hombre de 42 años, musulmán de origen árabe, que se ha convertido en uno de los símbolos del mayor atentado vivido en Francia en las últimas cuatro décadas.

Y es que la sangre fría mostrada por los yihadistas, cuando tras herirle en una pierna con un disparo le remataron dándole un tiro en la cabeza, ha conmocionado al mundo entero. Por ello, durante las manifestaciones celebradas en Francia en repulsa por la barbarie cometida en París, muchos quisieron recordar la valentía del policía.

De hecho, en las redes sociales al hastagh ´#JeSuisCharlie´ en honor a los fallecidos de la publicación Charlie Hebdo se ha sumado ´#JeSuisAhmed´, para honrar la memoria de Ahmed Merabet.

Estremecedoras imágenes de la masacre terrorista de París. Pueden herir la sensabilidad por su dureza.

Las víctimas mortales

Con la muerte del policía Ahmed Merabet, la masacre en el semanario "Charlie Hebdo" dejó doce víctimas mortales, entre las cuales se encuentran cinco de los más prestigiosos dibujantes de Francia, dos policías, un encargado del mantenimiento y una psiquiatra, entre otros.

Sumida en la consternación y la rabia, una multitud silenciosa se concentró este jueves en la Place de la Republique de París para mostrar su repulsa al salvaje ataque perpetrado contra el semanario y rendir homenaje a los fallecidos.

Al menos 30.000 personas, según los cálculos de una Prefectura de París sobrepasada por el éxito de la convocatoria, se congregaron en la plaza, un río de gente que -sustentado en la movilización espontánea a través de las redes sociales- colapsó las bocas de metro aledañas.

"Es doloroso pensar que nuestros compañeros han muerto por coger un lápiz", lamentó la novelista y periodista Tristane Banon, amiga personal del fallecido director de la publicación, Stéphane Charbonnier, "Charb". "Siempre me decía que hay que resistir, que hay que levantarse. Y por eso estamos aquí, ¿no?", añadió.