La primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, señaló este domingo que desconoce las razones que llevaron a un individuo, abatido esta madrugada en Copenhague, a protagonizar supuestamente dos tiroteos en los que murieron dos personas y cinco fueron heridas, y cuya identidad aún no ha sido facilitada.

"No conocemos las motivaciones de los actos del supuesto autor, pero sabemos que hay fuerzas que le desean el mal a países como Dinamarca. Quieren subyugar nuestra libertad de expresión", dijo en rueda de prensa Thorning-Schmidt.

Las autoridades danesas no han facilitado, de momento, más detalles sobre el supuesto terrorista, del que se habían difundido varias fotos captadas por cámaras de seguridad y que fue descrito como un hombre de entre 25 y 30 años y de "rasgos árabes".

"No estamos en una lucha entre el Islam y Occidente, entre musulmanes y cristianos, sino entre unos valores que se basan en la libertad individual y una oscura ideología", apuntó Thorning-Schmidt ante las sospechas de que se trate de un atentado fundamentalista.

El supuesto autor de los ataques abrió fuego este sábado por la tarde contra un centro cultural donde se celebraba un debate sobre blasfemia, un incidente en el que falleció un hombre y tres agentes resultaron heridos y al que asistía el artista sueco Lars Vilks, amenazado por grupos islamistas tras dibujar a Mahoma como un perro.

Según las hipótesis policiales, el mismo individuo disparó poco después de la medianoche contra la fachada de la sinagoga de Copenhague, en un atentado en el que resultó muerto un joven judío y heridos leves dos agentes.

El presunto autor de los ataques resultó muerto por disparos de la Policía horas después en el barrio multicultural de Nørrebro, al norte de la capital danesa.

Thorning-Schmidt calificó los hechos de "ataque a nuestra democracia y a todos los daneses" y señaló que Dinamarca ha vivido como nación "unas horas que nunca olvidaremos".

"Es tiempo para la unión en Dinamarca", dijo la primera ministra, que informó de que se mantendrá la alerta de seguridad en Copenhague los próximo días y pidió tiempo para que la Policía pueda descifrar las "muchas preguntas que quedan por resolver".

La dirigente socialdemócrata danesa reveló también que ha estado en contacto telefónico en las últimas horas con los primeros ministros de Alemania, el Reino Unido y Suecia.