El Parlamento Europeo (PE) propuso hoy difundir "un discurso alternativo" de "contrapropaganda" a la lanzada por organizaciones yihadistas y el Kremlin, que incluya a los jóvenes y actúe principalmente en el ciberespacio, con el fin de combatir la radicalización y contrarrestar los mensajes "de odio". Los eurodiputados acusan a Rusia de financiar y apoyar a "fuerzas anti-UE" como partidos de extrema derecha o populistas.

En un informe aprobado por 304 votos, 179 en contra y 208, los parlamentarios proponen reforzar la "escasa estrategia de comunicación" europea e invertir en educación con acciones en medios en línea, periodismo de investigación y "alfabetización informativa".

"Los Estados deben cooperar con los proveedores de servicios 'online' y las redes sociales para contrarrestar la difusión de la propaganda a través de estos canales", afirmó la ponente del texto, la polaca Anna Elzbieta Fotyga, de los conservadores y reformistas europeos (ECR), en una rueda de prensa.

Ante la ajustada mayoría, principalmente porque el texto apunta directamente al Kremlin y la vinculación de sus mensajes con la propaganda del terrorismo yihadista, Fotyga dijo que "no se están comparando ambas cosas" pero que, en los dos casos, "el público objetivo de esa propaganda es el mismo".

"El problema es que el sistema de medios ha cambiado, y mucha gente se conforma con aquello acorde a su identidad, bloquea lo que les reta y a eso hay que reaccionar", argumentó por su parte el socialista austríaco Eugen Freund.

La vicepresidenta de la Comisión Europea (CE) y alta representante para la Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, dijo en un debate previo al voto que la propaganda "siempre ha existido" pero que "se ha hecho más evidente con internet".

"Las redes sociales y los buscadores tratan de promover contenidos que confirman las visiones del usuario en lugar de retarles, y sabemos cuán relevante esto puede ser en términos políticos", afirmó Mogherini, para quien el reto es "tener en cuenta la seguridad y a la vez la libertad de expresión".

La jefa de la diplomacia europea lamentó que "la calidad de la información no es lo que determina que sea viral", pero apostó por un compromiso europeo con la sociedad civil y periodistas independientes que "a menudo no tienen las herramientas, los recursos financieros o el espacio la libertad para expresarse".

Mogherini habló principalmente sobre la lucha contra la propaganda de grupos terroristas y dijo que esta "debe eliminarse, en primer lugar, con los contenidos ilegales en internet".

La CE ha puesto en marcha una unidad, a través de Europol -la oficina de policía europea- que "escanea" la propaganda terrorista y notifica sus contenidos a las compañías y buscadores, con el fin de eliminarlos de la red.