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Joselin tiene 9 años y, pese a su corta edad, es una luchadora nata. Hace poco más de un año un hecho traumático le cambió la vida pero sus ganas de vivir, su espíritu de superación y la ayuda de la la ONG de acción social, infancia desfavorecida del Món, Menuts del Món, han hecho posible que hoy se encuentre en Valencia a punto de iniciar las pruebas para una operación muy delicada y, con ella, recuperar su dignidad.

Hace algo más de un año, Joselin M. A. fue víctima de la violencia doméstica: Presenció cómo su hogar ardía en llamas y su madre moría en el incendio. Ella sobrevivió pero sufre quemaduras en el 70% de su cuerpo y ha perdido la oportunidad de vivir una infancia como la de cualquier niño de su edad.

Este altercado ocurrió en su ciudad natal, Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), donde la ONG Menuts del Món gestiona un orfanato. "Voluntarios del centro nos avisaron de la situación de la menor y de la imposibilidad de poder ayudarla en Bolivia por lo que comenzamos los trámites para realizar su traslado", explica Esther Roig, presidenta de la ONG.

La responsable enfatiza que los trámites se realizaron siguiendo el Protocolo Internacional de Pacientes que, en este caso, se llevó a cabo a petición del Ministerio de Sanidad de Bolivia y por mediación de la ONG Menuts del Món. El proceso culminó gracias a la aceptación de la Conselleria de Sanidad, que "sin su consentimiento no hubiese sido posible", agradece Roig. "Su traslado internacional supone el primero de una menor y, además, el primero que se da por violencia doméstica", resalta la periodista.

Tras estos trámites administrativos -que se prolongaron durante 12 meses-, la pequeña llegó a Valencia esta semana para ser atendida en el Hospital la Fe por un equipo multidisciplinar que llevará personalmente el caso. "La próxima semana tiene la primera visita, que es un reconocimiento médico y una valoración de los daños sufridos tras la quemadura", avanza Roig, quién no duda en resaltar la gravedad de la operación y la labor del equipo de cirugía infantil del hospital la Fe de Valencia.

Según comenta, la operación "es muy delicada" ya que al estar en edad de crecimiento, su piel ha comenzado a crecer con las quemaduras. La intervención tiene por objetivo reconstruir la cara de la pequeña y devolver la movilidad de su brazo pero, ante todo, "se trata de una operación para devolver la dignidad de una niña", asevera Roig.

La pequeña, que en estos momentos se encuentra con una familia valenciana de Alboraia, afronta con valentía la intervención quirúrgica. "Joselin es una niña muy inteligente y es consciente de la gravedad de la operación pero es muy fuerte" y ella desea "ponerse linda".

La madre de acogida -que prefiere mantenerse en el anonimato-explica que la niña "al principio estaba retraída y le costaba salir de casa" pero, ahora, "juega con mis hijos en la calle y muestra sin pudor ni miedo sus quemaduras". De hecho, la pequeña está viviendo emociones nuevas y no quiere desaprovechar la ocasión de disfrutarlas al máximo: "Hoy ha visto el mar por primera vez y ha disfrutado muchísimo. Incluso hemos comprado un bikini -en lugar de un bañador- porque una amiga llevaba uno".

Según explica Roig, la niña permanecerá con la familia de acogida un año, tiempo en el que será operada y seguirá los consejos y recomendaciones de los médicos. Ahora, Joselin, comienza el camino para recobrar la dignidad y volver a sonreír como antes lo hacía. Sabe que es complicado pero su fuerza y su confianza en quienes le arropan y le rodean le da la energía suficiente para seguir adelante.