El mercado de fichajes de invierno en el Levante UD queda a la espera de una reunión entre el director deportivo Manolo Salvador y el técnico Lucas Alcaraz, en el que se analice la composición de la plantilla y la conveniencia de reforzar algunas posiciones. Hasta que no se produzca ese encuentro, no se tomarán decisiones sobre llegadas y, por consiguiente, la inevitable salida de jugadores para liberar fichas.

La posición en la que se han disparado los rumores es la delantera, aunque desde el club se niegan movimientos. Salvador, de momento, prefiere esperar a la recuperación de Rafael Martins, sobre quien no alberga dudas de su capacidad goleadora y de su contribución al equipo en la segunda vuelta del campeonato. Entre los nombres que han sonado perdería fuerza, en principio, el de Arouna Koné, propiedad del Everton y por quien se mantuvieron contactos en verano, sin que cuajase la operación. Su larga lesión de rodilla, que ya toca a su fin, lo ha mantenido inédito todavía esta temporada y despierta dudas sobre su competitividad a corto plazo, si tuviese que incorporarse al equipo en enero.

Otras dos horas de sesión

Por otro lado, el Levante UD prosiguió ayer con los entrenamientos en la ciudad deportiva de Buñol. Alcaraz planificó una dura sesión de trabajo que se prolongó por espacio de dos horas, y en la que tuvo un protagonismo principal el ejercicio físico. El entrenamiento no contó con la presencia de los internacionales Diop, Vyntra, Nikos, Simao, El Adoua y Camarasa, mientras que los lesionados Toño, Pedro López, Héctor Rodas, Martins y Gavilán se ejercitaron al margen del grupo para continuar con la recuperación de sus molestias.