Rubi no baja el pie del acelerador. Tras dos primeros intentos con buen juego pero sin resultados, el 0-3 en El Molinón ha sido la gran tarjeta de presentación de las intenciones del nuevo entrenador del Levante UD. Queda mucha lucha por delante pero el técnico catalán ha logrado voltear el estado de ánimo del levantinismo. A pesar de esos buenos síntomas, Rubi recalcó ayer que no caben confianzas y que el equipo debe ser «tozudo» y mantener el nivel mostrado en los dos últimos partidos, traducidos en cuatro valiosos puntos: «Si tenemos la fortuna seguir haciéndolo bien, los equipos van a estar avisados y nos van a generar seguro más dificultad. El equipo ha hecho tres buenos partidos He hablado con los jugadores para que seamos tozudos y no bajemos el nivel. Esperemos alargar la racha de buen juego, aunque habrá algún día que saldrá malo», afirmó ayer en rueda de prensa.

Rubi está gratamente sorprendido por el nivel por la asimilación que la plantilla tiene de sus planteamientos: «Me sorprende un poquito sí, los jugadores me están demostrando más de lo que yo podía llegar a pensar. Pero esto va a ser durísimo y nos quedan muchos puntos por sumar. Si pensamos que ya está, que ahora no vamos a sufrir, nos equivocaremos. Tengo la sensación de que cuesta mucho ganar partidos en Primera división. Vamos a intentar que nadie se relaje porque la situación vuelve a cambiar en tres semanas», insistió.

La segunda parte de Gijón

El entrenador del Levante UD quiso mandar un mensaje de exigencia a sus jugadores al recordar que, por ejemplo, en la segunda parte ante el Sporting en Gijón les faltó ambición cuando ganaban por tres tantos. «Me ha gustado la mentalidad del jugador de intentar sentirse bueno y, además, generoso en el esfuerzo. Lo malo son temas individuales y colectivamente haber interpretado mejor algunas jugadas. Creo que en Gijón nos faltó un puntito de ambición en la segunda parte, aunque es normal porque después de llevar tiempo sin ganar tienes ganas de que acabe el partido para verte con los tres puntos», indicó.

«Somos muy exigentes y hemos hecho un vídeo de lo que se puede hacer mejor en Gijón. Estoy contento porque el equipo ha cogido la idea de ser ambiciosos, querer ir a por el partido, no conformarse con un gol...», puntualizó. Por último, Rubi desveló que el argelino Nabil Ghilas, que ha perdido la titularidad, se entrena una hora más que sus compañeros para coger el ritmo físico idóneo. «Vamos a muerte con Ghilas. Está haciendo un trabajo extra espectacular».