«No teníamos un mediapunta así desde Barkero». El comentario, extraído de una inocente conversación entre aficionados a la salida del Ciutat de València el pasado viernes, refleja con fidelidad una sensación extendida entre el levantinsimo: Joan Verdú (32 años) es el futbolista que añoraba la parroquia granota desde la marcha de José Javier Barkero, en junio de 2013. Un jugador con el talento que exige desenvolverse por detrás de los delanteros, la experiencia de haber competido al máximo nivel, la capacidad de reconvertirse en mediocentro y con el hambre de recuperar el protagonismo en el fútbol español.

Con todo ello, el catalán, que ha aterrizado en Orriols con la misma edad que lo hizo Barkero „quien jugó en el Levante UD dos temporadas„, presenta todas las credenciales para afianzarse en el once inicial del equipo de Rubi. Tras su debú en Ipurua, de apenas unos minutos en la segunda parte, el entrenador confío en él el viernes para ocupar el interior derecho en la «final» por la permanencia ante el Getafe. Y Verdú respondió con nota. Brilló en la zona medular durante toda la primera parte, en la que afinó las conexiones con el tridente ofensivo, se dejó ver por el área rival y, además, colaboró en labores defensivas. En la segunda mitad, ya algo más cansado, regaló a la grada un gol en el que sacó a relucir todos sus recursos técnicos cerca de la portería.

Un estreno completo en el Ciutat de València, con victoria incluida, con el que se ha ganado a la afición azulgrana y al técnico, que valoró en rueda de prensa su esfuerzo. «Su gol ha sido la guinda del pastel. Joan nos ha dado mucha tranquilidad con el balón, aunque en la segunda parte ha estado menos participativo», destacaba Rubi tras el encuentro. Cabe recordar que esta temporada el centrocampista sólo había disputado ocho partidos con el Fiorentina, por lo que la falta de minutos en sus piernas todavía se deja nota.

A la conclusión de la victoria ante el Getafe, Verdú se mostró más que satisfecho con su primer partido en el Ciutat de València. «Lo primordial era conseguir los tres puntos, como fuera. Físicamente, en los últimos minutos costaba un poco más, porque era un partido de bastante exigencia», explicó. Sobre su posición en el terreno de juego, reveló que Rubi le pidió jugar en el llamado «carril del ocho». El mister quería que, desde la derecha, me fuera para dentro para combinar por dentro y fuera para crear superioridad en el centro del campo y aprovechar las subidad de Jefferson Lerma, que es un portento físico», concluyó Verdú.

El catalán, que ya conocía a Rossi de su estancia en Florencia, alabó las cualidades de Morales y Deyverson y afirmó que siempre hay sintonía con jugadores «de tanto nivel».

Morales bate su mejor registro

Con su último gol ante el Getafe, José Luis Morales acumula ya en su haber el doble de tantos de los que marcó la pasada campaña. No obstante, cabe destacar que el extremo ha jugado en la actual mil minutos menos que en el ejercicio 2014-15.