Un total de 114 levantinistas convirtieron ayer la grada visitante de Ipurua en una miniatura del Ciutat de València. Los futbolistas granotes tuvieron el apoyo durante todo el partido de este centenar de aficionados que se desplazaron en autobús desde la capital del Túria hasta tierras vascas. La expedición, impulsada por el club y la Delegación de Peñas partió del estadio de Orriols a las seis y media de la mañana y llegó a Eibar a las tres de la tarde entre de cánticos de ánimo al equipo de Rubi. Durante el encuentro, sus gargantas no pararon de animar y arroparon en todo momento a la plantilla, que no respondió a las expectativas.

Y es que, pese a la derrota, los aficionados del Levante UD no dejaron de animar desde su grada, en uno de los córners del estadio de Ipurua.

Nada más acabar el encuentro, este centenar de seguidores azulgrana se volvieron a subir al autobús para emprender el camino de vuelta, lento y amargo, hasta Valencia, a la lespera de mejores resultados en las próximas jornadas.

Más viajes en la agenda

La Delegación de Peñas del Levante UD, con su nueva directiva al frente, ya anunció su propósito de planear el máximo de viajes posibles para acompañar a los futbolistas fuera de Valencia. En la agenda está pendiente el próximo desplazamiento a Villarreal y, según los resultados que se den, no se descarta afrontar algún viaje para respaldas a la plantilla levantinista en otro partido a domicilio. En el calendario está marcado en rojo el último parartido de la temporada, en Vallecas ante el Rayo.

Despùés de una jornada que se presentaba como propicia para recortar distancias, el Levante UD sigie colista, con 17 puntos, a cinco de la zona de permanencia.