Superior en juego, intensidad y motivación, el Levante UD ha derrotado con toda justicia este mediodía en el derbi de la ciudad a un Valencia ramplón y que agudiza su mediocre trayectoria en una temporada para olvidar. El gol de Rossi confirma el dominio "granota" en los duelos en Orriols por cuarto año consecutivo y da vida al conjunto de Rubi para luchar por la permanencia. La zona de salvación queda a tres puntos, a falta de que se cierre el resto de la jornada.

En pie despedía la afición levantinista a su equipo tras una primera parte en la que los azulgranas habían acorralado a un Valencia plano, vivo unicamente por los impulsos puntuales de Feghouli y por las reflejos de Diego Alves en los cinco últimos minutos de la primer acto, con los locales subidos a lomos de Morales y Deyverson. La iniciativa siempre fue de los locales, mucho más necesitados que un Valencia ramplón y que por momentos rayaba la incomparecencia. Con una presión adelantada, y el empuje de su animosa hinchada, el partido se dirimía en el campo valencianista. Los de Rubi buscaron el recurso, siempre imprevisible para el rival, de Morales. Javi Fuego debía acudir a auxiliar a un Cancelo desbordado y que pocos minutos después acabaría lesionado, en otra dolencia más de los valencianistas en la primera parte.

Los visitantes se desplegaban con trote lento y Paco Alcácer desesperado en ataque, como un náufrago del que nadie escuchaba sus súplicas. Pero casi sin querer el Valencia sería el primero en morder. Feghouli en el minuto 12 se encontró con una pelota suelta dentro del área. El franco-argelino se lo vio demasiado fácil y se recreó en los recortes para chutar flojo ante un Mariño que desbarató la oportunidad. Tendría otra más Soso, en una conducción larga y con la vigilancia lejana de Juanfran. Se cambió el balón a la izquierda para buscar el palo largo de Mariño, pero se le marchó desviada.

Ahí se acabaron los argumentos valencianistas y comenzaría el asedio levantinista. En el minuto 20, previo control imantado de Morales, Rossi estrellaba el balón en el poste. Alves, en el minuto 32, cubría su poste para blocar el disparo sin ángulo de Deyverson, que le había robado la cartera a Abdennour. Entre medias, Orriols elevó decibelios para reclamar la segunda tarjeta a Parejo, en una entrada sobre Deyverson en la que Del Cerro Grande aplicó la ley de la ventaja. Cobijado en su conformismo, Alves tuvo que sacar manos para desviar un cabezazo de Deyverson y otro disparo del brasileño, tras una preciosa dejada de pecho de de Verdú, en los minutos 41 y 43.

El silbatazo del árbitro era una bendición para el Valencia. Sobre todo porque el paso por vestuarios calmó el ritmo del partido en los primeros minutos tras la reanudación. El juego se volvía más impreciso. El Valencia era incapaz de ejecutar incluso las funciones más elementales, como sacar la pelota jugada desde atrás. Esa apatía quedó patente en la acción del gol de Rossi, en el minuto 64. El italo-americano, ante la dejadez de toda la zaga, enganchó de primeras un saque de banda que se envenenó demasiado cruzado para Alves.

El fútbol hacía justicia para el Levante UD y el Valencia empezaba a emitir señales de nervio mientras el Ciutat de València entraba en ebullición. Neville, sin soluciones, optó por acumular efectivos en ataque (Negredo y Rodrigo). Una apuesta que sólo ahondó en la fractura táctica de los visitantes. No pasaría apenas apuros el Levante UD, salvo por una pifia de Parejo en un remate a placer tras una buena asistencia de Negredo. Un fiel retrato de lo que se ha convertido este Valencia incapaz. Orriols vuelve a sentirse con vida gracias a un Valencia cuyos sueños de remontada europea ante el Athletic Club el próximo jueves pasan por un acto de fe, porque fútbol no lo ha tenido en todo el año.

Levante UD: Mariño, Lerma, Feddal, Medjani, Juanfran, Simao (Pedro López, min. 73), Verza, Verdú, Morales, Rossi (Casadesús min. 76), Deyverson (Camarasa min. 85).

Valencia CF: Alves, Cancelo (Barragán min. 17), Mustafi, Abdennour, Siqueira, Javi Fuego, Parejo, André Gomes (Rodrigo min. 61), Feghouli, Piatti (Negredo min. 70), Paco Alcácer.

Goles: 1-0: min. 64 Rossi.

Árbitro: Del Cerro Grande. Auxiliado por Yuste Jiménez y Álvarez Cantón. Amonestó a Parejo, Abdennour, Simao Mate, Javi Fuego, Mustafi y Pedro López. 18191 espectadores en el Ciutat de València.