Por primera vez desde su llegada al Valencia, en noviembre pasado, Gary Neville se mostró autocrítico. Nunca antes se le había visto tan vehemente en una sala de prensa. Se erigió en máximo responsable de la marcha del equipo y, después, envió un mensaje a sus futbolistas. Un mensaje claro, sin filtros. «Lo que ha pasado hoy (por ayer) es inaceptable. Ha sido demasiado. Merecemos todas las críticas», sentenció.

Neville se mostró muy enfadado y pidió perdón a los seguidores del Valencia. «En el fútbol puedes perder oportunidades, pero hay que luchar», señaló. «He estado aquí tres meses y he estado delante de vosotros cuando han habido derrotas. Hoy no hay defensa alguna. Asumo toda la culpa de esta derrota. El juego ha sido inaceptable. Pido perdón a la afición. La premisa es que debes correr más que el rival. Hoy el Levante ha sido el mejor. No se puede defender lo que hemos visto», dijo. Luego, dirigió directamente la diana a los jugadores. «Hay que correr mucho más, hay que despejar balones, hay que ser mejor que el rival. Es imposible no encajar goles si uno no lo da todo».

«Lo que nunca haré es señalar a jugadores individuales. Estamos todos juntos. Les he dicho que estoy cabreado. El problema soy yo. No estoy culpando a los jugadores pero a ellos les he dicho que no podemos hacer lo que hemos hecho», añadió.

El técnico inglés negó, de forma insistente, que exista un problema de comunicación con su plantilla. «Tengo a 8 miembros españoles en el cuerpo técnico. Las líneas de comunicación han mejorado. No hay excusas. Decir eso sería un error. Los jugadores saben perfectamente lo que quiero», afirmó.

Neville se mostró convencido de que el jueves, en la vuelta de la Liga Europa ante el Athetic „el Valencia debe remontar el 1-0 del nuevo San Mamés„, el equipo va a mostrar otra actitud. «No vamos a jugar con esa intensidad, te lo garantizo. Tenemos que levantarnos inmediantamente», dijo con una frase ya escuchada de su boca.