Rendirse no es una opción para el Levante UD. El reto de la permanencia está más complicado que nunca tras el naufragio en el Nuevo Los Cármenes, pero el equipo azulgrana está obligado a ganar hoy al Athletic Club en un Ciutat de València sin entradas a la venta. Lo está por la necesidad moral de limpiar el escudo, dolorosamente manchado por la debacle en la capital nazarí ante 600 seguidores granotes que recorrieron mil kilómetros en autobús. Pero también por si hay milagro. Porque sólo con los tres puntos el Levante UD puede aferrarse a la última posibilidad de reengancharse a la pelea por la permanencia, todavía real si los astros del fútbol se alinean y se suceden los tropiezos del Getafe ante el Valencia y del Granada contra el Celta.

Para ello, los levantinistas deben recuperar su mejor versión como locales y volver a proponer el juego atrevido y agresivo con el que derrotaron al Rayo, al Getafe, a Las Palmas, al Valencia y al Espanyol. El opuesto al de Granada.

Rubi podría dar entrada a varias novedades en el once en busca de un golpe de efecto que cambie la dinámica del grupo. La única baja segura es la de Simao Mate, expulsado. Lerma podría regresar al centro del campo y Pedro López al lateral diestro. Además, Juanfran también recuperará su puesto en la banda izquierda en detrimento de Orban, sin convocar.

«La noticia buena es que el equipo salió tocado de Granada y digo buena porque quiere decir que nos ha afectado. Ha sido una cuestión de dedicar muchas intenciones y palabras para que la gente esté al cien por cien», destacó ayer Rubi, quien aún confía en la carambola. «Con 31 puntos estaremos ahí. Me preocupa más el hecho de ganar. Si lo conseguimos, por supuesto que estaremos en la pelea, segurísimos. ¿Van a ganar los cinco de abajo? Es imposible. Nos volveremos a acercar y si la definitiva es la última, que sea la última. Ganar mañana nos daría otra oportunidad», zanjó. Además, también hizo autocrítica. «Hemos hecho autocrítica y reconocido que estuvimos muy mal en la primera parte ante el Granada. Es lo único que podemos decir y no intentar vender películas de que si el árbitro o si lo hicimos mejor de lo que la gente dice», explicó.

Respecto al Athletic, valoró su buena línea toda la temporada. «Es un equipo que es muy difícil ganarle, con cambios súper óptimos, con una línea de juego mantenida todos los partidos. Ellos intentarán ponernos nerviosos. Hay que superarles sabiendo que será un partido en el que habrá que defender bien», indicó.

Sin Aduriz ni Laporte

El Athletic Club, con mínimas opciones de luchar por la Liga de Campeones, llega a Valencia con la baja de De Marcos, Aduriz, Laporte y Merino. «Ni siquiera les vale el empate. Es fundamental para ellos porque no les quedan muchas oportunidades», apuntó ayer el técnico de los rojiblancos, Ernesto Valverde.