Víctor Camarasa ha decidido forzar su salida del Levante UD para fichar por el Espanyol. El centrocampista de Meliana se negó ayer a entrenar con el resto de sus compañeros en Buñol, para sorpresa del entrenador, López Muñiz, y del director deportivo, Tito, presente en la ciudad deportiva. Fue tras la charla técnica previa al entrenamiento, ya sobre el césped, cuando Camarasa se dirigió a Muñiz para advertirle de que no iba a realizar «ejercicios de máxima exigencia» y que prefería trabajar en solitario. El técnico quiso hacerle cambiar de opinión, pero el jugador optó, tras cinco minutos de conversación, irse a otro campo para efectuar carrera continua al margen del equipo. Todo ello ante la atenta mirada de Tito, quien supervisó el entrenamiento in situ.

Una vez Camarasa dio por finalizado su sesión de preparación individual, unos cuarenta minutos después, el director deportivo se acercó a la puerta del vestuario para hablar con el futbolista. Después, el internacional sub-21 regresó a la hierba para mantener una prolongada conversación telefónica con sus agentes.

Poco más tarde, tras la presentación oficial de Álex Remiro y Róber Suárez, Tito explicó lo ocurrido. «Camarasa no ha entrenado porque no quería entrenar con su equipo, que es el Levante UD, y ha decidido hacer ejercicios en otro campo. Ha sido una decisión que ha comentado con el entrenador», señaló el director deportivo azulgrana.

Inquirido sobre si esta medida de presión de Camarasa tiene como meta impulsar su salida hacia el Espanyol, club interesado en el jugador, Tito aseveró que este tipo de actitudes no acelerarán ninguna operación. «Con este comportamiento, su salida no va a estar ni más cerca ni más lejos. Hay abiertas unas conversaciones y, si hay posibilidades de negociar, esto no nos va a minar en al forma de actuar. Camarasa tenía que haber sido un profesional y haber entrenado con el primer equipo y no ha sido así. No ha sido un comportamiento profesional y así se lo he hecho ver a él», subrayó. «Le he recomendado que se comporte como un buen profesional, porque hay cosas que no deben cruzarse. Él tiene que demostrar que es un profesional y luego pueden pasar muchas cosas. Todo pasa por que el Levante UD salga beneficiado, si no es así no se pueden tomar decisiones unilaterales», concluyó Tito.

Al respecto, el presidente de la entidad granota, Quico Catalán, avanzó que el club tomará medidas disciplinarias para castigar la actuación del centrocampista valenciano. «Es una actitud que no podemos aceptar y vamos a analizar la situación. Se ha hablado con sus agentes y vamos a ver. Es un acto de indisciplina y no vamos a ser flexibles. Le hemos trasladado que entendemos que se equivoca. El club tomará todas las medidas que tenga que tomar. No vamos a mirar para otro lado», incidió el dirigente. «Estamos en el fútbol profesional y hay unos contratos. No voy a cambiar mi actitud o posición por medidas de presión. Por los cauces normales puede haber puntos de encuentro, pero en estos momentos no tenemos ninguna oferta por escrito por Camarasa. Podemos tenerla en las próximas horas. Existe una comunicación con el Espanyol, pero es muy difícil que Camarasa salga traspasado del Levante UD, por las conversaciones que hemos tenido. Eso no va a cambiar. El Levante UD no va a malvender jugadores por estas actitudes», remachó Catalán.

Víctor Camarasa tampoco entrenó con el grupo en la sesión vespertina, confirmando sus intenciones.

Acuerdo del jugador con el Espanyol

Desde el entorno del jugador se asegura que el Espanyol de Quique tiene un acuerdo con el futbolista, que no se ha sentido querido en Orriols „tiene una cláusula de 12 millones y percibe la ficha mínima en Segunda, cerca de 60.000 euros„. El club perico ofrece 1,5 millones de euros por su traspaso, pero el Levante UD prefiere una cesión, pese a que podría haber intercambio de jugadores.