Una de las imágenes del partido la protagonizaron Muñiz y Espinosa. El técnico asturiano había dado entrada al centrocampista en el descanso, en sustitución de Natxo Insa. Sin embargo, a diez minutos para el final, el entrenador del Levante UD decidió retirar al mismo Espinosa para sacar a Casadesús. El futbolista de Talavera, que en los últimos tres partidos ha partido siempre desde el banquillo, se marchó cara de pocos amigos al banco. Muñiz lo detuvo y charló con él unos segundos. «Había que entrar con más juego en el medio del campo contrario. Cuando metimos a Espinosa era porque no encontrábamos esa posición de mediapunta. Pero al tenerla había muchas pérdidas y había contras. Intentamos sacar un punta y simplificar el juego. Era complicado, porque el rival repliega líneas y era difícil robarle en su campo. Quisimos pasar de un mediapunta a tener un punta para el juego directo y evitar pérdidas en el medio campo que tantos nervios nos provocaba. Entiendo la situación. Sale en el descanso y se le quita en el 35 de la segunda parte, pero no es un cambio a Espinosa, es un cambio de posición. Se quita un mediapunta, es un cambio a la posición. Porque no entraba en juego y muchas veces entraba y era perjudicial, porque había pérdidas y contras. Ese juego combinativo no encajaba en el partido, no lo encontramos con comodidad. Se intentó estabilizar el partido, no nos interesaba un partido de transiciones, un partido roto. Por todo eso me paré cinco segundos a habalr con Espinosa», aclaró Muñiz en rueda de prensa posterior al partido.

Morales, de nuevo al banquillo

Otro de los cambios fue Morales, como ya pasó en Miranda del Ebro. El exremo madrileño aún no ha marcado, aunque Muñiz aseguró que no debe tener ansiedad. Asimismo, durante la mañana, el entrenador dejó fuera de la convocatoria a Raubén García y Saveljich por razones técnicas. El extremo de Xàtiva no juega desde el partido de Copa, a principios de septiembre.