Paciente, sobrio y contundente. Lejos del Ciutat de València, el Levante UD de Muñiz se enfunda el traje de equipo efectivo. Con él ha sido capaz de conquistar cuatro victorias a domicilio y alcanzar los 30 puntos en 13 jornadas de campeonato. Un lujo. Y es que es un traje a medida que le queda bien a este líder imparable, aunque sea menos vistoso que el que luce algunos domingos en Orriols.

Ayer, ante un rival complicado y peleón como el Reus „todavía no había perdido en su estadio„, el conjunto azulgrana se defendió con orden, aguerrido y asfixiante en la presión, a la espera del momento justo para soltar el golpe decisivo. Lo hizo pasada la hora de partido, cuando el cuadro catalán bajó la guardia un instante.

Roger, incansable a la caza del gol, aprovechó de manera felina un error garrafal de Atienza. El central del Reus se equivocó al dar un pase atrás en busca de su portero y Roger instauró el 0-1 con entrenada facilidad. Su diana, ya van once esta temporada, bastó para sumar los tres puntos y poner tierra de por medio con los perseguidores en la tabla.

Raúl Fernández, discutido hace una semana en Orriols, aportó su grano de arena a la victoria con una soberbia parada de reflejos tras un remate de cabeza de Carbiá, a apenas dos metros de la línea de gol. Cuando el balón parecía entrar en la portería azulgrana, el meta vasco se sacó una mano antológica que mantuvo su puerta a cero. Esa jugada, como el disparo que marró Máyor en el primer tiempo en un mano a mano ante el guardameta granota, fueron los únicos momentos en los que el Reus puso en dificultades al Levante UD.

Porque, si bien es cierto que los de Tarragona dominaron en la primera parte, también lo es que no crearon ocasiones peligrosas. Excepto la de Máyor y algún disparo lejano, el equipo de Muñiz supo frenar bien a su rival en el centro del campo. No obstante, no conseguía robar y tocar. Aún así, Roger tuvo en sus botas un tiro cruzado que rozó el gol. Fue un aviso de lo que estaba por llegar.

En la reanudación, Muñiz dio entrada a Rafael por Lerma. Con un Natxo Insa inconmensurable, el técnico apostó por un jugador más de ataque. El brasileño probó fortuna tres veces antes de que Roger rompiera el partido con su tanto. Lo que vino después fue media hora de oficio, de saber estar y minimizar el juego del rival. De sufrir con serenidad. De ser líder.

Máxima diferencia

Con los tres puntos de ayer, el Levante UD ya suma 30 en 13 jornadas y es líder destacado. El equipo de Orriols aventaja en diez puntos al segundo clasificado, el Real Oviedo, con el que tiene que verse las caras en dos semanas. El último puesto de promoción está a doce puntos. Se trata de la mayor ventaja de toda la temporada.