Benditos los problemas de López Muñiz para confeccionar la alineación del próximo domingo. El Levante UD regresó ayer a la rutina de los entrenamientos en la Ciudad Deportiva de Buñol con varias novedades. En primer lugar, Oier Olazábal se estrenó con sus nuevos compañeros sobre el césped. Abraham Miniero y Espinosa, a los ya conocía de su paso por la Masia del Barcelona, le dieron la bienvenida en el vestuario levantinista.

Además, Chema Rodríguez se ejercitó con total normalidad y está disponible para jugar ante el Nàstic una vez superada su lesión muscular, producida el pasado 14 diciembre en el encuentro ante el Rayo Vallecano. La vuelta del central madrileño obliga ahora a Muñiz a tomar una decisión sobre Róber Pier. El joven defensor gallego, cedido por el Deportivo para esta temporada, ha brillado con luz propia desde que la baja de Chema le abrió un hueco en el once. Tanto es así que, con él en el campo, el Levante UD ha conseguido enlazar seis victorias consecutivas sin encajar ni un solo gol. La racha se rompió el fin de semana pasado en Alcorcón. Cabe recordar que, hasta su lesión, Chema era uno de los puntales del equipo en el centro de la zaga, titular indiscutible para Muñiz junto a Postigo. Por tanto, el domingo el entrenador asturiano tendrá que decantarse entre premiar el trabajo de Róber o volver al once de gala.

La recuperación de Chema no fue la única nuena noticia en la sesión de ayer. Iván López, pese a que continúa sin poder ejercitarse con el resto de sus compañeros al cien por cien, sí que efectuó con ellos una parte del entrenamiento, lo que señala que su rehabilitación progresa. Sin embargo aún no hay fecha para su alta médica y Pedro López, apercibido de sanción, es el único lateral derecho.

El otro gran dilema de Muñiz pasa por el centro del campo. Con la baja de Campaña „podría estar recuperado para el duelo ante el Zaragoza dentro de dos semanas„ el centro del campo azulgrana necesita un recambio en la función de organizador. Con Insa como titular fijo, Lerma, Verza y Espinosa „los tres entran en las alineaciones de manera intermitente„ compiten por completar el tridente medular. Lerma y Espinosa, por los antecedentes, parten con ventaja para ser de la partida el domingo.