El entrenador del Levante, Juan Ramón López Muñiz, aseguró ayer que los nueve puntos logrados en las primeros cinco jornadas de Liga refuerza su proyecto, pero recordó que «no vale de nada», y se centró en preparar el partido de mañana ante el Betis en Sevilla. «Tenemos que hacer un buen trabajo y seguir en la línea marcada. Nuestra intención es hacer un buen partido», dijo Muñiz en la rueda de prensa posterior al entrenamiento del equipo.

El técnico del Levante afirmó que el partido ante el Betis «será muy difícil e igualado» y destacó el potencial de su rival y, sobre todo, al centrocampista Joaquín Sánchez, un futbolista al que en su opinión deben «tener muy en cuenta.

Tenemos que afrontar el partido desde el respeto, pero de tú a tú. El Betis trabaja muy bien, tiene jugadores con un buen trato de balón y velocidad en la salida. Será un partido muy difícil e igualado. Aquel equipo que tenga más aciertos y menos errores ganará, indicó Muñiz. «Joaquín es un gran jugador. Es un futbolista a tener muy en cuenta. Lee muy bien los partidos, juega y hace jugar sus compañeros. Y el golpeo del balón lo tendrá siempre», resaltó.

«Una liga muy exigente»

El técnico asturiano fue preguntado por el delantero Álex Alegría, que todavía no ha marcado en Liga a pesar de haber sido titular en los cinco partidos y que podrá jugar en Sevilla a pesar de estar cedido por el Betis. «Mantiene una línea extraordinaria. Su trabajo nos ayuda mucho. Da la cara. Lo deja todo con esfuerzo. Nos aporta cosas muy interesantes», dijo. Además, Muñiz lamentó las bajas por lesión de Jason, que se une a las de Iván López y Jefferson Lerma, todos con roturas musculares. «Es una lástima, pero son situaciones propias de una Liga muy exigente. Ahora tiene que recuperarse con paciencia»,finalizó el técnico azulgrana.