El Levante UD pagó ayer la falta de pegada de su delantera, con un Bardhi desaparecido y un Alegría poco efectivo, ante un Betis que aprovechó el mal inicio de los azulgrana en la segunda parte para matar el partido en tres zarpazos.
El choque de estilos se evidenció desde los primeros compases. El Betis trató de atacar la defensa del Levante UD con posesiones propias del balonmano, de lado a lado a la espera de hallar alguna rendija entre las líneas azulgrana. La presión granota, desde Alegría hasta Raúl Fernández, ahogó a la delantera verdiblanca, víctima una y otra vez de la defensa levantinista, capaz de tirar la línea con fiabilidad milimétrica para provocar los fueras de juego de Sanabria y Sergio León.
El Betis no logró acercarse a la meta de Raúl hasta el minuto 22, con un tiro forzado de León que se marchó al lateral de la red. Para entonces, el partido había cambiado. El Levante UD, eficaz a la hora de recuperar el balón, había amagado con un puñado de contragolpes que enfriaron la caldera del Villamarín.
No obstante, en ninguno logró ver la puerta rival. El primero fue en el minuto 3, con una arrancada de Morales que murió en la frontal del área con una falta que debió costarle una tarjeta a Durmisi. El árbitro se la perdonó. El libre directo, de manera inédita, lo mandó Bardhi a la barrera. Fue la mayor aportación del macedonio, ayer muy desdibujado sobre el césped.
Ivi y Morales por los costados, sin el habitual apoyo de Pedro López y Toño, lo intentaron sin éxito. Mientras, Alegría volvía a sufrir en el área. El delantero extremeño dispuso de un buen centro de Pedro López en el minuto 38 en el que se adelantó a la zaga bética y remató, pero con tan poca fe que el balón se le fue muy arriba. De sus botas no surgió mucho más. Pobre balance para el delantero centro del Levante UD.
Con todo ello, más un par de tímidas aproximaciones del Betis, el descanso llegó con el 0-0 como resultado favorito en las casas de apuestas. No se iba a cumplir.
Error fatal a los dos minutos
A los dos minutos de la reanudación, el Betis combinó con velocidad y al primer toque en su banda derecha. Toño no llegó a tapar el centro de Sergio León y Sanabria, libre a la espalda de Postigo, remató ajustado con la cabeza desde dentro del área para inaugurar el marcador. El tanto, sin embargo, pudo ser anulado por un posible fuera de juego en el arranque de la jugada.
El escenario cambió drásticamente. Los de Muñiz dejaron de sentirse cómodos y el partido empezó a fracturarse en favor de los de Setién. Fabián, después de una conducción eterna en la zona de tres cuartos, batió a Raúl con un disparo raso y cruzado para apuntillar la noche. Pero aún quedaban muchos minutos y el Betis quería más.
Nano debutó como levantinista en un intento de Muñiz de taponar la hemorragia, pero Sergio León anotó el tercero y Sanabria, ya en el añadido, convirtió el cuarto para cerrar una noche para olvidar.
