Muñiz sigue manteniendo intacto el crédito que le otorgó la triunfal campaña que llevó al Levante otra vez a la máxima categoría del fútbol español. Tiene el apoyo incondicional del presidente, Quico Catalán, y del director deportivo, Tito.

¿Pero qué responsabilidad tiene Muñiz? Mucha como capitán de la nave que es, pero no es el único responsable. Trabaja con los mimbres que le han dado que, por lo visto hasta la fecha, no parecen suficientes para una temporada tranquila.

Hace modificaciones respecto al comienzo de temporada que hasta la fecha no surten efecto. Ya ha tenido que cambiar de portero, ya que empezó Raúl de titular y ahora es Oier el que está bajo los palos. Empezó con Chema y Postigo como centrales intocables y no parece dar con la tecla tras ir apostando también por Róber y Cabaco. En los laterales Coke parece que ya es insustituible tras intentarlo con Pedro López y un inexperto Shaq. En la izquierda ni Toño ni Luna aportan la seguridad que el técnico desearía.

En el centro del campo Muñiz ya ha comenzado a optar por prescindir de Campaña, jugador que la pasada temporada era vital en su esquema. Y es que el técnico asturiano está haciendo cambios para dar con la tecla adecuada y parece debatirse entre el modelo con el que llevó al equipo a un ascenso histócio y que también le dio un buen resultado al principio de esta temporada. Ahora es cuando Muñiz tiene la posibilidad de tomar decisiones para revertir la crítica situación.

Y es que el Levante UD tiene motivos para preocuparse. Más que por los números, por las sensaciones que transmite el equipo. Las cifras no invitan al optimismo aunque a día de hoy, en las 20 jornadas disputadas, aún no ha ocupado puestos de descenso.

Es más, el equipo de Muñiz supera en la jornada 20 los puntos conseguidos a estas alturas en las campañas de los dos últimos descensos: en la 2015-16 tenía 14 puntos y en las 2007-08 solo había conseguido 9. Ahora ostenta 18.

La imagen es otra cosa. El Levante ha caído en picado desde que en las primeras cinco jornadas consiguiera 9 de 15 puntos tras ganar al Villarreal y Real Sociedad y empatar con el Valencia en el Ciutat de València y empatar con el Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

Pero el conjunto que levantó admiración y llegó a ser calificado de revelación comenzó un progresivo declive que le ha llevado a coquetear con el descenso. Y es que el mismo equipo que cimentó en Orriols ese gran inicio de liga ha sido incapaz de volver a ganar en su feudo después de derrotar a la Real Sociedad. Lejos de su estadio, los azulgrana se han mostrado más fuertes: ha perdido 3 encuentros, ha ganado en Las Palmas y ha empatado 4.

Sus últimos guarismos son alarmantes: desde que ganara en Las Palmas solo ha logrado 3 de 24 puntos posibles. ¿Qué le ha pasado al Levante para estar cerca del descenso? El principal problema la falta de gol. Hasta que marcó Roger en Villarreal tras seis meses de baja, ninguno de sus delanteros había anotado.

Entre falta de puntería y la escasa generación de ocasiones, el equipo sufre una alarmante sequía goleadora que ahora, con media liga transcurrida, se quiere solucionar en un mercado de invierno que no siempre ofrece buenas posibilidades. En la temporada 2010-11 el Levante incorporó a Caicedo en la segunda vuelta y el equipo que entonces entrenaba Luis García sumó 30 puntos y acabó con 45, logrados en parte gracias a los 13 goles que marcó el delantero ecuatoriano. Álex Alegría -ahora lesionado-, Nano Mesa y Boateng han sido hasta la fecha un sonoro fracaso.

Otra de las claves es la falta de refuerzos de calidad en la defensa, sobre todo en la parte central. Ni Postigo, Chema, Róber y Cabaco parecen ofrecer las suficientes garantías.

El centro del campo que tan bien funcionó en el inicio del campeonato ha ido acusando la baja forma de un Campaña, que se ha ido diluyendo, y un Bardhi intermitente, poseedor de un gran toque de balón pero que, a pesar de marcar 4 goles, le falta regularidad y más presencia física.

En las bandas el mejor es Morales. Ivi da una de cal y otra de arena, Jason no está a la altura del año pasado después de la lesión de principio de temporada y Samu está a años luz del jugador que brilló, sobre todo, en el Málaga.