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Uno de 18 y seguimos

Uno de 18 y seguimos

Ante un Valencia CF que venía de seis derrotas consecutivas y de un esfuerzo superlativo tres días antes, en Copa ante el Barça, el Llevant tampoco fue capaz de puntuar. El trencilla Medié, un Ferrete cualquiera de nuestro tiempo, truncó el sueño de ganar en Mestalla, al abortar de forma inverosímil el 1-2 de Coke. A partir de ahí, con los granota desquiciados, todo se fue al garete, entre otras cosas porque Muñiz, con 2-1 y 25 minutos por delante, atajó cualquier posible reacción al descabezar la sala de máquinas ( Lukic-Doukouré) que había sostenido al Llevant en pie y con opciones.

¿Qué sucedió antes del fatídico minuto 64? Idas y venidas, escasas ocasiones de gol y superioridad local a los puntos. A pesar de todas las circunstancias, parece excesivo cargarle al Llevant la exigencia de ser superior al Valencia en Mestalla. Y sin embargo, el partido de los blaugrana, hasta el 1-2, fue como la segunda mitad ante el Madrid: un clavo ardiendo, un chupito de ilusión, breve, intenso. No es menos cierto que también asomaron por doquier las fragilidades que azotan al equipo desde finales de septiembre del 17: permeabilidad del centro de la zaga; agujero en el carril derecho, siempre huérfano de coberturas; el papel insustancial de Campaña, y la sequía de asistencias al área. Hemos pasado cinco meses así y seguimos sin atisbo de solución, hartos de escuchar siempre las mismas excusas en rueda de prensa.

Anoeta suele ser propicio para el levantinismo. Y hoy será determinante. Pasado el Tourmalet (Barça, Celta, Villarreal, Deportivo, Madrid y Valencia) con el deprimente bagaje de 2 puntos de 18 posibles, el Llevant entra en su fase decisiva. Los próximos ocho enfrentamientos son la última posibilidad de una reacción que permita salvar la categoría. Llegan Real Sociedad, Alavés, Getafe y Girona a domicilio; y Betis, Espanyol, Eibar y Las Palmas en Orriols. Ocho rivales no sólo para escapar del descenso, sino además para llenar el granero, ya que en el tramo final de Liga se visitará a Atlético, Athletic, Leganés y Celta y vendrán a Orriols Málaga, Sevilla y Barça. Encajar esta traca final sin los deberes hechos, sin una distancia solvente con el descenso, fiar el futuro en Primera a lo que se pueda sacar en estos siete partidos se antoja suicida.

Hoy en Donostia están en disputa tres puntos y la última esperanza, tras una victoria en dieciocho partidos, algo inaudito. El Llevant tiene hoy mejor plantilla que hace unos meses: con Lukic y Doukouré en el once, con Roger recuperado y Lerma de vuelta en breve, con Pazzini, con Coke y Luna en bandas, con futbolistas esperando aun la alternativa? Está por ver si es capaz de convertirse, además, en un equipo que sume de tres en tres y revierta la situación. En ellos está nuestra última esperanza. Hoy empieza el futuro. Hoy es el día de decir adiós al uno de 18 y empezar a salvarse.

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