Después de salvar in extremis dos match ball ante el Deportivo de la Coruña y el Real Madrid, López Muñiz vuelve a estar en el punto de mira. Un amplio sector del entorno levantinista considera que el técnico ha tenido demasiados oportunidades para enderezar el rumbo del equipo, pese a que la dirección deportiva del club ha respaldado la posición del entrenador asturiano en los últimos días y siempre ha mostrado su confianza en él. De hecho, Muñiz amplió su contrato por dos temporadas el pasado verano.

No obstante, los números del Levante UD apuntan que el equipo necesita una reacción de emergencia. A dos puntos de la zona de descenso, los azulgrana sólo han ganado un partido, ante la UD Las Palmas, en las últimas 19 jornadas de Liga. Por aquel entonces, los de Muñiz disfrutaban de una renta de ocho puntos sobre la zona de descenso. Doce jornadas después, precisamente el equipo canario, ahora en manos de Paco Jémez, está a dos puntos del Levante UD.

Además, el conjunto de Orriols no sabe lo que es ganar en su estadio desde hace una vuelta entera del campeonato, ya que la última vez que la afición levantinista celebró los tres puntos en su estadio fue el 20 de septiembre, en la jornada 5, ante la Real Sociedad.

Con todo ello, el Levante UD no ha conseguido reaccionar y Muñiz ha perdido fuerza en el banquillo, aunque desde el club se asegura que se sigue confiando en su trabajo.

Dos fichajes en el once

El Levante UD firmó a siete futbolistas en el mercado de enero para solventar las carencias del equipo. Ayer, en la segunda mitad de febrero, sólo dos de ellos (Coke y Pazzini) formaron en el once inicial de López Muñiz.