Las estafas en las revisiones del gas no son una leyenda urbana. La Guardia Civil ha sorprendido esta semana a cuatro falsos técnicos (están imputados por un delito de estafa) que acudían a domicilios de residentes extranjeros de avanzada edad de Calp. El pasado lunes, la Guardia Civil tuvo conocimiento de que cuatro personas, vestidas con el uniforme de la empresa de suministro de gas, acudieron a la vivienda de un matrimonio alemán. Sólo estaba en casa el hombre, de 90 años y que apenas habla castellano. Le convencieron de que debían revisar la instalación. Los falsos revisores aseguraron al anciano que debían cambiar algunos componentes para que la instalación cumpliera la normativa y funcionara correctamente. Y le pasaron una factura de 660 euros, que el anciano les pagó a tocateja.

Los agentes comprobaron que los componentes cambiados estaban perfectamente. Las descripciones de estas personas, españolas y de entre 40 y 56 años, se difundieron entre las patrullas de la zona. La Guardia Civil dio pronto con los presupuestos estafadores. Los halló en una calle de Calp. Iban uniformados como técnicos. Ya han pasado a disposición judicial y están imputados por un delito de estafa.