Y ganaron los alumnos. El colegio público Pou de la Muntanya, en Dénia, es el primero de España que libera a sus escolares de dos horas semanales de deberes. La empresa juguetera Cayro propuso al centro que los chavales y sus maestros se jugaran en el tablero del Quizzers, un juego de preguntas y respuestas adaptado al currículo escolar de los participantes, mantener las seis horas de deberes semanales (si ganaban los profes) o bajarlas a cuatro, que es la media de los estudiantes europeos. Los alumnos estuvieron más agudos que sus maestros. Y así este colegio, en el que estudian 470 niños, rebajará a partir de ahora la carga de deberes que los escolares se llevan a casa.

El director del Pou de la Muntanya, Sergi Mallol, explicó que «hacía tiempo que estaba sobre la mesa el debate de los deberes». «Es un paso importante que nuestro centro sea el primero comprometido públicamente desde este mismo curso con el máximo de cuatro horas semanales de deberes, lo que nos equipara a la media del resto de países de la UE», subrayó el director.

Mientras, la directora de Cayro, Rosario Carrió, incidió en que el objetivo de esta iniciativa era poner sobre el tapete que «jugar también puede mejorar el rendimiento escolar». «Con muy poco esfuerzo y algo de imaginación, es posible conciliar el aprendizaje y la diversión», sostuvo. Así pues, jugar es (siempre lo ha sido) un deber al que los niños le deben echar horas y horas.