Tras un verano de restricciones, la Marina Alta no termina de dejar atrás los problemas de suministro de agua. Una reunión celebrada ayer en la Diputación de Alicante para desbloquear las obras que permitirán a Xaló y Llíber recuperar el suministro potable (desde hace ocho meses el agua que mana de los grifos no se puede beber) acabó en fiasco. El diputado de Compromís y edil en Xaló Gerard Fullana advirtió de que el 60 % de la población de ambos municipios espera una solución. La diputación ha aplazado las obras que debe llevar a cabo para garantizar el suministro potable hasta que Xaló termine la reparación de las tuberías en las que se pierde gran parte del caudal que entra en la red. El gobierno local, de Compromís, estima que estos trabajos no se finalizarán hasta junio como mínimo.

«Por motivos partidistas y después de denegar en 2014 ayudas para el suministro de agua y la mejora de la red, ahora esperan que estemos año y medio más sin agua potable», denunció Fullana.

El diputado de Compromís calificó de «indignante» la falta de voluntad de la diputación para resolver este problema, cuando «es precisamente para esto para lo que están estas administraciones.

Fullana y el alcalde de Xaló y presidente de la Mancomunitat de la Vall del Pop, Joan Miquel Garcés, plantearán hoy un proyecto para recuperar el agua potable.