Teulada y Benissa ya caminan de la mano. Ayer sus alcaldes, en un día que ambos coincidieron en calificar de «histórico», firmaron el convenio que hace de estos dos pueblos una única «área urbana funcional». A efectos administrativos, el acuerdo supone unir el destino de dos pueblos vecinos y que, socialmente, siempre han conectado. Hay muchas familias que son medio benisseras y medio teuladinas. El convenio es sobre todo importante porque suma. En población, estos pueblos, por si solos, se quedan en tierra de nadie. Benissa tiene 11.598 vecinos empadronados (ha ganado 26 respecto a 2014), mientras que Teulada se queda en 11.460 (ha perdido 364 en un año). Juntos llegan a los 22.058 habitantes y superan con creces la barrera de 20.000 que exige la Unión Europea para lograr financiación para proyectos urbanos y estratégicos de desarrollo sostenible. Ambos pueblos van detrás de conseguir fondos de la UE para dotar de alcantarillado a sus urbanizaciones. Miles de casas de la costa vierten sus aguas residuales a fosas sépticas.

Cinco empresas consultoras optan a asesorar a la nueva área urbana funcional en ese objetivo de lograr dinero de Europa.

«Hoy empezamos a decidir qué queremos ser de mayores», explicó el alcalde de Teulada, Carlos Linares. «Iniciamos una nueva etapa muy ambiciosa», añadió el munícipe de Benissa, Juan Bautista Roselló.