Las iglesias de la Marina Alta no están para echar las campanas al vuelo. El párroco de Teulada, Vicente Solera, aprovechó ayer la misa de Sant Vicent Ferrer (es el patrón del municipio) para advertir de que la cúpula de la ermita está deteriorada. «No podemos dejarla de la mano, ya que amenaza un poco de peligro», dijo. La homilía tuvo lugar, como todos los años, en esta ermita del siglo XVIII de estilo neoclásico. El sacerdote explicó que se había actuado en las vidrieras de la cúpula. «Algunas estaban tapadas y otras viejas. Y al subir hemos descubierto que la cúpula está muy dañada».

El párroco avisó de que las filtraciones de agua todavía «pueden deteriorar más la estructura». Afirmó que es un «reto» restaurar cuanto antes esta cubierta. «Tenemos que buscar la manera de poder rehabilitarla con la ayuda de Dios y de todos», planteó.

La ermita estaba llena de festeros y de vecinos. Teulada vivió ayer el día grande de sus fiestas patronales. Desde el exterior, se observa que en la cúpula hay tejas rotas y otras que han perdido el color azul vidriado tan característico de los templos neoclásicos de la Marina Alta.

El deterioro del templo de Teulada no es una excepción. El pasado mes de noviembre se hundió parte de la cúpula de la capilla del Ecce-Homo de Pego, que ahora se está reconstruyendo. Mientras, el Poble Nou de Benitatxell ha iniciado el proyecto para restaurar la cúpula de su iglesia de Santa María Magdalena. En Xàbia, en la ermita del Calvario, ya se está trabajando. Un andamio envuelve el templo y la cúpula, también de tejas de color azul vidriado. Las obras las acometen los ayuntamientos. El arzobispado no arrima el hombro.