No solo los ayuntamientos con alcaldes de PSPV y Compromís están suprimiendo el «bou embolat» y el «encaixonat» al considerar que se inflige maltrato al animal. Benissa, donde gobierna el PP en minoría, también ha prohibido estas modalidades taurinas. El pleno ha aprobado una moción contra el maltrato animal que incluye la eliminación del toro embolado y de las desencajonadas. El acuerdo salió adelante con los votos a favor de toda la corporación excepto de un concejal popular Adrià Ivars, que se abstuvo. Fue la única nota discordante en una corporación que ya intentó este año persuadir a la comisión de fiestas de la Puríssima Xiqueta de que eliminase el «bou embolat». Pero los espectáculos ya estaban contratados.

Benissa es el quinto pueblo de la Marina Alta que suprime estos espectáculos taurinos tras Ondara, Xàbia, el Poble Nou de Benitatxell y Gata. Es, eso sí, el primero con un alcalde del PP, Juan Bautista Roselló, que da el paso. Calp, donde también gobiernan los populares, no celebrará este agosto, en sus fiestas de la Mare de Déu de les Neus, «bou embolat», pero es un acuerdo puntual para este año. En cambio, Benissa, al aprobar la moción contra el maltrato animal, sí se ha dotado de un marco legal que impide estas modalidades de «bous al carrer».