El exalcalde de Calp, Javier Morató, del PP (luego fundó Alternativa Popular), se ha quitado un peso de encima. El magistrado de Benidorm que juzgó el caso del supuesto amaño de un alquiler lo ha absuelto a él y a los otros acusados, entre ellos los exediles populares Linda Townsend y Juan Vicente García. Se les acusaba de prevaricar. En junio de 2005, Townsend arrendó un piso de su propiedad a un matrimonio británico amigo suyo. Y solo un mes después éstos subarrendaron la vivienda al ayuntamiento, que pagó 22 meses de alquiler (13.200 euros).

El juez advierte en la sentencia de que, «siendo clara la irregularidad o ilegalidad en el procedimiento de contratación, ello no implica per se la comisión de un delito de prevaricación». Sostiene que, aunque chirriaba que los arrendatarios alquilaran el piso al ayuntamiento sin ni siquiera ocuparlo y que le cobraran la misma renta (600 euros) que ellos pagaban a la edil popular, al final prevaleció un «interés social». Recuerda que el consistorio alojó en ese piso a médicos del centro de salud que no podían pagar los altos alquileres de Calp. «Nos encontraríamos ante una contratación no permitida a un concejal (causa de incompatibilidad) que si bien respondería a un evidente interés personal, ese interés iría directamente relacionado con un interés social», concluye el juez.