Los socorristas de la empresa Eulen, que se encarga de la vigilancia de las playas de Calp, salvaron la vida en la mañana de ayer a una bañista de 88 años que se sintió indispuesta tras salir del agua. La anciana, que había acudido a tomar el baño a la playa de la Fossa, empezó a sentirse mal y sufrió una parada cardiaca. Los socorristas la atendieron con rapidez y le hicieron la maniobra de reanimación. Tenían listo el desfibrilador, pero no tuvieron que utilizarlo. Lograron que la anciana recuperara el pulso. Luego la trasladaron en ambulancia al centro de salud de Calp.

Accidente en la Grava de Xàbia

Mientras, en Xàbia, una bañista de 27 años sufrió una fractura en el tobillo al caer mal en la plataforma hinchable de la playa de al Grava. Los socorristas de la Cruz Roja la inmovilizaron. Le colocaron una férula en la pierna y un collarín. La llevaron a puerto en una embarcación. Allí esperaba la ambulancia para trasladarla al hospital.

Además, una joven de nacionalidad suiza sufrió ayer un desvanecimiento en la piscina de unos apartamentos de Xàbia. La piscina cuenta con socorrista, quien atendió a la chica, que fue trasladada en ambulancia al hospital. El desmayo se atribuye a que no había comido bien en los últimos días.