La Cova Tallada se lleva la palma este verano en rescates. Los turistas están acudiendo en tropel a una gruta a la que es complicado llegar tanto por tierra (la senda es peligrosa) como por mar (el kayak está de moda). Una mujer de mediana edad que participaba en una excursión en kayak se convirtió ayer en la cuarta persona rescatada de la cueva y sus inmediaciones en las últimas 48 horas. Sufrió una insolación y se mareó y empezó a vomitar. Los socorristas de la UTE Salvamar, que vigila las playas de Dénia, la evacuaron en una moto acuática hasta les Rotes, donde esperaba una ambulancia que la trasladó al hospital.
Esta racha de rescates comenzó el martes, cuando una turista de 58 años se rompió el tobillo. Los bomberos la evacuaron en helicóptero. El miércoles una anciana de 70 sufrió un golpe de calor y también fue rescatada en helicóptero. Mientras, un chaval de 16 años sufrió una lipotimia.
