La discoteca Molí Blanc volvió anoche a llenarse de jóvenes que asistían a una de esas fiestas con DJ (antes pinchadiscos) que se han puesto tan de moda. El sábado tiene anunciada otra sesión con DJ de mucho tirón. Sin embargo, desde ayer esta sala está en el limbo. Anoche la policía local le notificó que el ayuntamiento ha rechazado, por presentarse fuera de plazo, las alegaciones contra la revocación de su licencia de actividad. Por tanto, la discoteca carece de permiso para seguir abierta. Mientras, la policía local desplegó anoche un dispositivo especial en las inmediaciones del Molí Blanc para acabar con un botellón que reúne a más de mil jóvenes.