El fondo marino de Calp se libera de fantasmas. Un equipo de Ghost Fishing Costa Brava, dirigido por Raúl Álvarez y del que formaban parte Marc Balletbó y el coordinador de la ONG, Cas Renooij, quien se desplazó a Calp desde Holanda, retiró ayer unos 200 metros de redes fantasma que llevaban años enganchadas en las rocas submarinas del Penyal d´Ifac. Las redes estaban a algo más de 20 metros de profundidad y a 50 metros de la costa. Eran una amenaza para las especies marinas (cetáceos, tortugas o tiburones), ya que si se quedan atrapadas mueren irremediablemente. Los buceadores contaron con la colaboración del club Dive&Dive. Sacaron a flote las redes con globos elevadores. La tarea fue ardua. Las artes de pesca, mojadas, pesaban en total unos 250 kilos. Renooij explicó a Levante-EMV que la ONG, que empieza a tener presencia en todo el mundo, busca concienciar sobre el daño al ecosistema que provocan estas redes de pesca abandonadas.