La plaga de cerdos vietnamitas que se declaró en el Saladar de Xàbia, cerca del turístico núcleo del Arenal, está en vías de acabarse. Una residente británica ha decidido adoptar a todos los animales, que son más de cuarenta. De momento, ha podido atrapar a once y los ha llevado a un amplio terreno vallado y habilitado con comederos y abrevaderos. A los otros, es difícil capturarlos. Recelan de las personas tras sufrir mil perrerías de gamberros (un vándalo declaró en la Guardia Civil por matar con sus perros a varias crías). Se pide que no se de comida a los cerdos vietnamitas para que esta vecina tenga más fácil atraerlos y atraparlos.
