El Ayuntamiento de Calp no ha olvidado el apagón que obligó en 2015 a las «filaes» a desfilar con las luces de los móviles a modo de antorcha. El consistorio considera que aquel fallo de suministro, que dejó a medio pueblo sin luz, fue un incumplimiento grave de la compañía Iberdrola. Ocurrió el 24 de octubre de 2015 y coincidió con el gran desfile de gala de las fiestas de Moros y Cristianos.

El apagón dejó a oscuras gran parte del recorrido justo cuando lo iniciaba el boato de la Capitanía Mora. El desfile se paró durante al menos dos horas. Pero la luz no volvía. El alumbrado de fiesta no lució nada. Los moros retomaron la marcha en penumbra.

El pleno ha aprobado hoy imponer a la empresa una multa de 75.000 euros, que descontará de los recibos de los próximos meses. Valora el impacto negativo en un día de máxima afluencia turística y el daño sobre una fiesta tan arraigada como los Moros y Cristianos.