Una racha de viento convirtió ayer en un amasijo de plásticos y hierros la carpa que hoy debía acoger el sopar de germanor de las Fallas de Dénia, acto que ha quedado suspendido. La estructura, de 1.000 metros cuadrados, salió volando. El viento la desplazó 50 metros. Ocurrió sobre las 20 horas. Dentro había tres personas y otras tres se hallaban en el exterior.

Vicent Ivars, de 57 años y que es miembro de la junta local fallera, se encontraba dentro. La carpa se le vino encima. Un soporte de metal le golpeó con fuerza en la espalda. Fue trasladado en ambulancia al hospital, donde anoche seguía en observación. Podría tener fracturado el omoplato.

Las otras personas, entre ellos integrantes de la orquesta Capital 90, que hoy debía actuar en el sopar de germanor, salieron ilesos. Eso sí, se llevaron un susto tremendo. El viento arrancó las zapatas de la carpa, que se hinchó como un globo y salió volando.

Por la mañana, los técnicos del ayuntamiento la habían inspeccionado. Cumplía todas las medidas de seguridad. Se montó en la zona de Torrecremada, que está muy abierta y nada resguardada del aire. A media tarde, el tiempo cambio y el viento empezó a soplar con fuerza.

Los bomberos de Dénia acudieron alertados de que podía haber alguien atrapado. Fue una falsa alarma. Durante algunos minutos reinó gran confusión. Faltaba un miembro de la orquesta. Se había marchado y, al rato, mientras lo buscaban, apareció. La Policía Local, Protección Civil y la Cruz Roja también intervinieron.

El sopar de germanor no se podrá celebrar hoy. La carpa quedó destrozada, irrecuperable. Debía acoger a 1.066 falleros. La concejalía de Fiestas y la junta local fallera decidieron suspender el acto.