El negocio de la alimentación vive un momento de retos. Los supermercados se lanzan de cabeza a los productos de proximidad y, al tiempo, al menos en la Marina Alta, deben llenar la despensa de esa numerosísima población que ha llegado de otros países.

La cadena de Pedreguer Masymas, de la empresa Juan Fornés, S. A., siempre ha tenido olfato para detectar los cambios en el sector. Va por delante. Ahora lo ha vuelto a demostrar. Ayer abrió en Xàbia un nuevo supermercado que es pionero en sostenibilidad y que se halla en un punto comercial estratégico. Próximo al núcleo turístico del Arenal, este establecimiento, que cuenta con 110 plazas de aparcamiento (una asignatura pendiente de los otros supermercados de la compañía en Xàbia), ya atrae a clientes de las urbanizaciones y a vecinos de siempre. Ayer bullía de actividad. Fue abrir sus puertas y empezar el frenesí. Los residentes extranjeros acudieron en tropel.

Este supermercado, el cuarto de Xàbia (los otros están en el Arenal, el Puerto y el pueblo), es el número 129 de la compañía. La empresa pedreguera ha invertido 3,2 millones en ponerlo en marcha. El flamante edificio cuenta con un aislamiento envolvente que permite reducir al máximo la climatización. De hecho, está en la vanguardia de la sostenibilidad. La iluminación es Led, los congeladores y murales de frío reducen la pérdida energética, y el sistema de refrigeración por CO2 (refrigeración natural) dispone de recuperadores de energía. El gasto eléctrico se rebajará en un 30 %.

«Esta tienda es muy especial para la familia Fornés», destacó ayer José Juan Fornés, que recordó que la marca llegó a Xàbia hace ya 26 años. En el nuevo supermercado trabajan 36 empleados. Los clientes pueden encontrar, además del amplio surtido de productos que ofrecen todas las superficies de Masymas, delicias exclusivas xabiencas. En la pescadería, hay un mostrador con pescado fresco de la cofradía local. Ayer, cómo no, se podía comprar la gamba roja que capturan los arrastreros de Xàbia.

En la sección de pastelería, tiene un mostrador el histórica obrador local Diego. Sus monas de Pascua son excelentes. También la pastelería Austriaco, que está en el Arenal y vende panadería y bollería del centro de Europa, está presente en este Masymas. Además, una empresa familiar del municipio, Bo i fet Menjars, especializada en comidas para llevar, se ha hecho cargo de la sección de cocina, donde los clientes pueden llevarse suculentos platos recién preparados.

A la inauguración asistió una amplia representación del Ayuntamiento de Xàbia (siete ediles y el alcalde, José Chulvi). El munícipe subrayó que la empresa pedreguera se ha ganado la confianza del consistorio por «su trabajo bien hecho».

La compañía sabe de sobra el terreno que pisa. Lleva 29 años en Xàbia. Sus otros supermercados tienen el inconveniente de no disponer de aparcamientos propios. Son más para el vecindario. Ahora, con esta moderna tienda, Masymas irrumpe en el meollo comercial del municipio. De punta a punta, en la carretera del Cap de la Nau, que es donde está la nueva tienda, hay ocho supermercados. Ante tanta competencia, la empresa de Pedreguer ha decidido apostar fuerte.

El compromiso con la sostenibilidad tiene, además, otra vertiente. El 5 % de la recaudación de ayer, el primer y frenético día, se destinará a regenerar el paraje litoral de la Granadella, asolado por el fuego el pasado mes de septiembre.

El nuevo Masymas tiene gran variedad en alimentación. Los clientes pueden comprar zumo de naranjas de Oliva recién exprimido. También disponen de sushi fresco, de un surtido extensísimo de quesos o del exclusivo champán Laurent-Perrier. El supermercado cuida todos los detalles. Cuenta con aparcabicis y con enganches para dejar atados fuera a los perros.