Un capitán de la Guardia Civil asistió como letrado durante las primeras horas de su detención a la conductora que el pasado 7 de mayo arrolló en la N-332 en Oliva a un grupo de seis ciclistas de Xàbia, de los que tres murieron y dos continúan ingresados en estado grave. La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de la Comunitat Valenciana denunció ayer que este mando podría haber incurrido en una falta por el régimen de incompatibilidades, aunque fuentes cercanas al capitán, destinado en Las Palmas de Gran Canaria, sostienen que no se ha incumplido en ningún momento la normativa y que éste cuenta con la debida autorización para ejercer la abogacía.

Por su parte, desde la AUGC se apuntan posibles irregularidades en la instrucción de las diligencias del accidente. Según la agrupación mayoritaria de la Benemérita,el citado capitán ejerce de letrado en la demarcación en la que ocurrió el atropello múltiple, donde también trabajó hace años, «lo que generó una sensación de desconcierto entre el personal interviniente al no entenderse en un principio en calidad de qué estaba presente dicho mando en el lugar».

Además, la AUGC criticó que el capitán «fue beligerante» con los agentes y sembró «dudas de la correcta actuación del personal del destacamento de tráfico de Gandia». Por ello la asociación pide que se abra de inmediato un expediente de información reservada para aclarar si hubo injerencias o incompatibilidades. Fuentes próximas al capitán defienden que éste sólo asistió a la detenida unas horas y enseguida delegó en su compañero de despacho.