Una nueva experiencia turística soltó ayer amarras en Dénia. Ya hace tiempo que el sol y playa se quedaron estrechos. Los turistas quieren que les den caña. En este caso, más que la caña, se pone en sus manos la red de pesca. Dénia es la primera ciudad de la Comunitat Valenciana en la que la Agencia Valenciana de Turismo lanza el producto «Pesca Turisme». Desde hoy los turistas ya se pueden enrolar en la tripulación de un barco de pesca, comprar el pescado a bordo y luego acudir a uno de los restaurantes que participan en esta iniciativa a que se lo cocinen. Los visitantes conocen la esencia marinera de Dénia, que abre una nueva vía de rentabilidad (la del turismo) para el sector de la pesca y difunde esa cocina de producto fresco que le ha valido el título de Ciudad Creativa de la Gastronomía de la Unesco.

«Pesca Turismo» ya navega. El secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, el alcalde de Dénia, Vicent Grimalt, y la presidenta de la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de la Marina Alta, Cristina Sellés, se embarcaron ayer en un catamarán y, junto a miembros de la cofradía de pescadores y profesionales del sector turístico (también estudiantes), observaron de cerca como la tripulación del Fliper, un barco tradicional dianense, capturaba pulpos.

Al regresar a puerto, los participantes acudieron a la lonja. Allí asistieron a la descarga del pescado. Luego acudieron al CdT de la Marina Alta, donde su personal y los alumnos cocinaron las capturas del día.

Colomer precisó que la conselleria de Agricultura y Pesca ha tenido que modificar algunas normativas para permitir que los turistas se suban a las barcas profesionales. Dijo que la pesca también puede convertirse en «un gran recurso turístico» y que, de este modo, «se diversifica la economía, la oferta turística y avanzamos hacia un modelo más cualificado y experiencial, que es lo que demandan los mercados». La pesca es un anzuelo para el turismo.