La Associació Cultural Paleontològica de Gata atesoró durante años una impresionante colección de fósiles, materiales arqueológicos y animales disecados. Los guardaba en un local municipal que nunca llegó a convertirse en museo. Ahora el ayuntamiento ha pedido a la asociación que desaloje el local. Muchos de los materiales proceden de donaciones hechas por particulares. La entidad paleontológica, según ha podido saber este diario, se había puesto en contacto con estas personas para entregarles los antiguos tesoros.
La colección se disgregaba y existía el peligro de que algunos fósiles se perdieran. Y los hay muy valiosos, como los de trilobites (pueden llegar a los 500 millones de antigüedad), ammonites, helechos o dientes de tiburón. También llama la atención un esqueleto completo de toro. Destacan igualmente las ánforas romanas y los cántaros íberos y medievales.
Los agentes del Seprona acudieron ayer al local y al ayuntamiento para llevar a cabo el inventario de todas esas piezas. La primera teniente de alcalde, Àngels Soler, estuvo colaborando con los agentes.
Los materiales arqueológicos podrían incorporarse al espacio museográfico abierta hace pocos meses en el sótano del ayuntamiento. Mientras, el Seprona quiere analizar la importancia de los fósiles de la colección paleontológica. Es evidente que tienen un gran valor histórico y, como poco, debe controlarse dónde van a parar. La sección de taxidermia debería cederse a un museo de historia natural. Lo fundamental ahora es que estos vestigios de la antigüedad no se despisten.
