El Ayuntamiento de Dénia ha iniciado una campaña dirigida a la concienciación con el respeto por el medio ambiente y la naturaleza en general, en el marco del Plan de Acción Local de la Ciudad Creativa de la Gastronomía. Una campaña que ayer presentó el concejal del ramo, Josep Crespo y que entre otras aparte del aspecto para los vecinos apuesta por introducir cláusulas medioambientales en los pliegos de las contratas municipales.

Según explicó el edil ayer en rueda de prensa la intención es incluir criterios medioambientales en las bases de contratación del ayuntamiento, que otorguen puntuación a las empresas más respetuosas con el medio ambiente, que controlen las emisiones de CO2, la contaminación del suelo o trabajen con energías renovables.

Mientras estas cláusulas se materializan y se adaptan a la legalidad de la ley de contratos de las administraciones públicas, el equipo de Medio Ambiente ha preparado 30 líneas de actuación que han agrupado en Estrategia de Dinamización Agraria y Territorial.

El responsable de la dinamización del plan, Alvar Kuehn, destacó que pretenden «fomentar la producción, formación, comercialización y consumo de productos locales y ecológicos e impulsar una Administración más sostenible».

Para ello establece cuatro ámbitos de trabajo en los que se enmarcan las acciones diseñadas. Son gobernanza, territorio, promoción económica y formación.

El de gobernanza pretende, entre otros, el empoderamiento del sector agroalimentario y el fomento de la colaboración entre la administración y el sector.

Un segundo ámbito se dedica al territorio y recoge entre otros fines, la realización de un diagnóstico y valorización del entorno medioambiental, la creación de un banco de tierras o de un banco de semillas o la confección de un mapa agronómico de nuestro territorio.

En el ámbito de promoción económica, la estrategia busca el fortalecimiento del mercado local o el fomento del ecoturismo, entre otras metas.

Por último, se trabaja en el campo de la formación, con acciones como la formación continua en agricultura o el proyecto para conseguir formación certificada en agricultura ecológica; la educación, a través del programa Hort a escola, que contempla impulsar los huertos escolares, fomentar el producto local en los colegios o realizar visitas a los productores locales con los alumnos.