Un intenso aguacero ha descargado esta mañana sobre la Marina Alta y se ha tragado una de sus playas más emblemáticas, la de les Deveses. De hecho, las olas ya golpean contra los muros de las terrazas de las casas de primera línea. Este tramo litoral, que ya sufrió graves destrozos durante el temporal de enero, experimenta una fuerte regresión. Las casas, construidas en 1928, tienen de nuevo el mar encima tras las lluvias torrenciales de esta mañana.

Esta noche las fuertes lluvias han obligado a cortar la CV-673 a la altura de Bellreguard en ambos sentidos.

Otra de las consecuencia de la tormenta de hoy ha sido que algunas calles como la del núcleo turístico del Arenal de Xàbia se han inundado. Los sistemas de drenaje han funcionando bien, pero la fuerza del chaparrón ha anegado calles, dado que los imbornales no han dado más de sí.

El chaparrón ha sorprendido a los vecinos y turistas más madrugadores que han salido pronto para practicar deporte, sobre todo correr y montar en bici. Los deportistas se han refugiado donde han podido.

En concreto, la intensa lluvia ha obligado a cortar varias calles: la Barbacana, el Camí del Llavador, el Camí de la Bota y l'Assagador de la marjal, cruce con la calle Melva. También se ha cerrado la calle Joan Fuster desde Diana hasta Pou Muntanya, en la parte nueva, así como el Camí de Gandia a la altura de la carretera de Alcalalí.

En Xàbia, en la partida Lluca, se han recogido ya 52,5 litros por metro cuadrado, aunque el lugar donde más agua ha caído ha sido en Dénia, en el Montgó. Allí se han registrado lluvias torrenciales que han dejado marcas de 78,6 litros por metro cuadrado, mientras que en Madrigueres se han recogido 39 l/m2 y 29,7 l/m2 en Moraira.

Las olas ya golpean directamente contra las terrazas de las casas de primera línea

Dénia ha perdido en pleno mes de agosto una de sus playas más emblemáticas. El temporal se ha tragado esta mañana la playa de les Deveses. Las olas ya golpean contra los muros de las terrazas de las casas de primera línea. Este tramo litoral sufre una fuerte regresión. El temporal de enero causó incluso graves destrozos en las casas. Y no son viviendas construidas antes de ayer. Datan de 1928. Sus propietarios se ven otra vez el mar encima.