Gata reivindica a su gran matemático y quiere que sus jóvenes se contagien de la pasión por esta disciplina que siempre demostró Vicent Caselles Costa, un investigador que, lejos de refugiarse en la cátedra y la teoría, se empeñó en utilizar las matemáticas para resolver problemas cotidianos. La concejala Teresa Arabí se rodeó ayer de una pléyade de matemáticos y físicos de la Marina Alta para presentar las jornadas científicas y la beca que llevarán el nombre de Vicent Caselles.
Este brillante matemático, uno de los más importantes del Estado y cuyas investigaciones tienen eco internacional, falleció el 14 de agosto de 2013. Contaba 53 años. Su labor científica, centrada en los curvas de nivel y el análisis y procesamiento de la imagen (investigaciones con enormes aplicaciones médicas), se vio truncada. Pero dejó escuela. «Otros matemáticos están continuando el camino de investigación que él abrió», subrayó ayer el profesor de la Universitat de València Pep Mulet, uno de los impulsores de estas jornadas, que tendrán lugar los días 6, 7 y 8 de julio.
El cartel ya da pistas. Es la reconstrucción del Montgó con curvas de nivel. Las conferencias tendrán un carácter más de divulgación mientras que los talleres serán más especializados. Los expertos abundarán en la trascendencia de las investigaciones de Vicent Caselles.
Gata le ha puesto a su instituto el nombre del matemático, al que también ha concedido el título de Hijo Ilustre. El ayuntamiento quiere que Vicent Caselles se convierta en un ejemplo para los jóvenes. De ahí que haya creado también un premio dotado con 2.000 euros que se entregará al estudiante que logre el mejor expediente y se decida a estudiar matemáticas (o, en su defecto, física).
A la presentación de ayer, acudieron Olga y Juan, la madre y el hermano de un gran investigador y catedrático de la Universitat Pompeu Fabra que, además, fue una persona cercana, afable, sencilla y muy querida por sus vecinos.
