La cala de la Barraca de Xàbia vive días de esplendor turístico. Las fotos de sus casitas de pescadores blancas y azules (tienen un aire Santorini) y de l´Illa del Portitxol inundan instagram. Y las bodas han hecho mucho por poner en el mapa a esta playa de cantos rodados. Desde hace seis años, parejas de medio mundo acuden a Cala Clemence a darse el «sí» quiero. Ahora este negocio de eventos se ha transformado. Los empresarios Marta Iglesias y Eric Slama tienen vista (la de la Barraca es impresionante). Han abierto Cala Clemence a todo el mundo. La han transformado en un «beach club» que está llamado a convertirse en el local de moda del verano. Ya triunfa, de hecho. «¿Cuál es el secreto? Fácil: naturaleza y mar», resume Eric Slama. El nuevo local se asoma a la bahía del Portitxol. Está en primerísima línea. En unos días, abrirá también por las noches. «Hemos apostado por integrar el bar en la esencia de la Barraca», afirma el empresario.